anterior

volver a "Guiones de Bioética"

ir a página principal

siguiente

Compendio de Bioética

 

 24. TÓPICOS SOBRE EL HAMBRE EN EL MUNDO

Se dice que la población mundial no dispone de alimentos suficientes. Para reconocer esta afirmación como un tópico basta con mirar los siguientes datos (tomados de la FAO 1994):

Año

Producción de cereales

Población

millones de Tm

crecimiento anual

miles de millones

crecimiento anual

1950

631

 

2,51

 

1960

863

3,7

3,03

2,1

1970

1.137

3,2

3,68

2,1

1980

1.432

2,6

4,42

2,0

1994

1.950

2,4

5,70

1,7

Si el hambre existe, no es tanto por falta de recursos como por un mal reparto de los mismos. Se da la lamentable paradoja de países con excedentes alimentarios (Brasil, India) a los que no acceden grandes capas de su población.

La “revolución verde” de la India

Durante muchos años, se ha identificado la India con el hambre. Parecía algo inmutable. Pero algo sucedió en 1967...

Por una terrible sequía, centenares de miles de niños y ancianos murieron de hambre en el estado de Bihar, al nordeste del país. Los Estados Unidos ayudaron, pero el presidente Johnson pidió a cambio la adhesión de la India a su política en el Vietnam. Indira Gandhi decidió no volver a pasar por otra humillación semejante.

El agrónomo Swaminathan fue puesto al frente de la política agraria. “Indira Gandhi me exigió que creara, en cinco años, un stock de cereales de diez millones de toneladas. Yo farfullé: ‘¿Por qué diez millones?’. Porque era exactamente la cantidad que la primera ministro había tenido que mendigar a los americanos”. La “revolución verde” había comenzado.

Veintidós años después, cuando Swaminathan narraba en una entrevista con Guy Sorman cómo había sucedido todo, la India disponía de una reserva de cereales no de diez, sino de 50 millones de toneladas, el equivalente al de la UE de aquel año. En 1987 esta reserva permitió a la nación asiática afrontar una sequía que en otra época hubiera sembrado de muerte su territorio.

La “revolución verde” fue posible gracias al arroz IR-36, un fruto de laboratorio obtenido tras cruzar especies salvajes: crece rápidamente, su tallo es corto, la espiga cargada y muy resistente a las enfermedades y a las inclemencias. El IR-36 triplicó los rendimientos y revolucionó las agriculturas india, paquistaní, indonesia y filipina.

Veinte años después de la fecha histórica que marcó el comienzo de la “revolución verde” la India producía más arroz por habitante que en 1966, pese a que en ese periodo la población había aumentado en más de 100 millones.

 

anterior

volver a "Guiones de Bioética"

ir a página principal

siguiente