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2. LA AUTORREVELACIÓN DE JESÚS

EN LAS BODAS DE CANÁ

 

 

 

 

Bodas de Caná (Jn 2,1-12)

 

Al tercer día se celebraron unas bodas en Caná de Galilea, y estaba allí la madre de Jesús. También fueron invitados a la boda Jesús y sus discípulos. Y, como faltó vino, la madre de Jesús le dijo:

‑No tienen vino.

Jesús le respondió:

‑Mujer, ¿qué nos importa a ti y a mí? Todavía no ha llegado mi hora.

Dijo su madre a los sirvientes:

‑Haced lo que él os diga.

Había allí seis tinajas de piedra preparadas para las purificaciones de los judíos, cada una con capacidad de unas dos o tres metretas. Jesús les dijo:

‑Llenad de agua las tinajas.

Y las llenaron hasta arriba. Entonces les dijo:

‑Sacadlas ahora y llevadlas al maestresala.

Así lo hicieron. Cuando el maestresala probó el agua convertida en vino, sin saber de dónde provenía ‑aunque los sirvientes que sacaron el agua lo sabían‑ llamó al esposo y le dijo:

‑Todos sirven primero el mejor vino, y cuando ya han bebido bien, el peor; tú, al contrario, has reservado el vino bueno hasta ahora.

Así, en Caná de Galilea hizo Jesús el primero de los signos con el que manifestó su gloria, y sus discípulos creyeron en él.

Después de esto bajó a Cafarnaún con su madre, sus hermanos* y sus discípulos; y se quedaron allí unos días.

 

*Al decir "hermanos" de Jesús, el Evangelista se refiere sus parientes. Este uso era frecuente en los idiomas antiguos. Así se llamaba "hermanos" de Jesús a Santiago el menor y a José (cfr. Mt 13,55) que realmente eran primos de Jesús (cfr. Mt 27,56 y Jn 19,25), hijos de una “hermana” de la Virgen María. Jesús no tuvo hermanos.

 

 

Algunas consideraciones para meditar el misterio

 

- La Virgen era una invitada a la boda. Sin embargo sigue pendiente de todo y de todos. Las celebraciones durarían más o menos una semana –como era costumbre entre los judíos- y se iba a acabar el vino… (¡Qué vergüenza para los novios!)

- El Evangelio no dice nada, pero entre el “todavía no ha llegado mi hora” y el “haced lo que Él os diga” debió mediar una mirada de María a Jesús, mirada que consiguió adelantar la hora del primer milagro: la mirada de María… - María es “omnipotente” porque es la “omnipotencia suplicante”: Dios no le niega nada a su Madre.

- “Llenad las tinajas”: nada de cosas a medias: ¡llenas! – “Llevadlas al maestresala”: ¡Qué absurdo!, ¡si es agua!: pero tienen fe. Y el maestresala prueba un poco de esos 500 litros de vino “de primera calidad”: los sirvientes reconocen el milagro, y los discípulos creen en el Señor.

 

 

 

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